Sucedió en Asturias. Un joven fue detenido por reventar más de 40 máquinas tragaperras para robar la recaudación. En Burgos, otro causó desperfectos por valor de más de 1.000 euros para llevarse poco más de 400. Y en Zaragoza, los cacos aprovecharon para robar más de 1.500 euros. Ya se ha visto, esta acción delictiva no es un acto aislado. Basta echar un vistazo a las hemerotecas para comprobar que son numerosos los ladrones que aprovechan las horas en las que los bares permanecen cerrados para sustraer el dinero de estas máquinas.

Por eso, es fundamental contar con buenos sistemas de seguridad en maquinas tragaperras. Technobouncer, una empresa con base en Montcada i Reixac (Barcelona), ofrece diferentes soluciones para plantar cara a los cacos.

Armarios retráctiles y plegables

Una posibilidad pasa por instalar armarios retráctiles y plegables de máxima seguridad para proteger las máquinas recreativas. Existen dos modelos. Ambos destacan por sus puertas plegables y desmontables, que facilitan el transporte y su posible recambio. Además, son muy fáciles de instalar y se adaptan a todo tipo de máquinas recreativas con premio. También pueden anclarse al suelo y la pared para evitar sustraciones e incorporan ruedas, si así se desea, para facilitar su traslado. Este armario impedirá a los ladrones llevarse la recaudación de las tragaperras.

Blindaje de policarbonato

Otra opción es instalar blindajes de policarbonato. Son una especie de panel blindado a medida que se instala en el frontal de la máquina tragaperras, incluyendo un protector de serigrafías. Es muy fácil de instalar y, lo más importante, protege la recaudación y los pagadores de la máquina, por lo que no hay que preocuparse de posibles actos vandálicos. Además, el diseño de este panel respeta la estética de la tragaperras. La instalación de esta protección apenas se nota en la máquina, que sigue dando la misma sensación de uniformidad.